Diana Rosada

Diana Rosada preguntaba dónde vive la guerra.
Se lo dijo al gato que le tiraba besos
por encima de la tapia.
Lo murmuró entre las rosas serenadas por el amanecer.
Interrogó a los suaves rayitos de sol
que iluminaban sus brillantes alitas al despertar.
Diana frágil,
Diana suave.
- A lo lejos, a lo lejos - parecían decir todos.
¿ Por qué nadie entendió su lenguaje de mariposa ?
Diana magia,
Diana gloria.
Irrumpió con los alisios y sintió la guerra en el miedo,
en la crisis, la escasez;
la adivinó en el hambre, la desespeanza y el "quién sabe".
La vio en el tumulto rotulado con "devaluación", "desempleo".
La escuchó en el desajuste proclamado como ajuste.
Diana enigma,
Diana luz.
Buscó al sabio pisapapel.
- ¿ Dónde vive la guerra ?
¿ Estará acaso en la página quince, pues todo el mundo la evade ?

- La guerra está muy cerca, contestaba el sabio.
La escucho cuchichear arriba del muro.
La atiza el tirano y la alimenta el débil.
La empuja el corazón apabullado por la dificultad.
Asoma sus garras entre los ojos del hambre y la miseria.
Se levanta sobre la impaciencia y el ansia de libertad.
Se anima con el poder,
descansa en la impotencia y la frustración.
La veo venir,
está más cerca de lo que puedes ver.

Diana chispa,
Diana impetuosa.

Diana Rosada quiso saber si aún estaba a tiempo
de buscar un poco de miel.
Esta vez el silencio fue la respuesta, por siempre.

Demasiado rosa,
demasiado bella,
demasiado complicada,
Diana Rosada

De Pluma en Silencio. Xinia M. Estrada. 2006